Durante la inspección a 21 hospedajes se detectaron irregularidades ya que no contaban con licencia sanitaria, problemas en la manipulación de alimentos y deterioro en infraestructuras.
Todo esto con el objetivo de garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias. La ARSA aplicó las medidas correctivas correspondientes y capacitó al personal para que los ciudadanos reciban servicios adecuados que no pongan en riesgo su salud.